AUTOR: JUAN REBOLLO RUIZ
TÍTULO: EL DIAGNÓSTICO
ISBN: 978-84-9194-936-7
EDITORIAL: CÍRCULO ROJO (2018)
Juan Rebollo Ruiz es español, de Mollina, Antequera, Pcia de Málaga.
Licenciado en Periodismo (UCM). Durante su trayectoria ha desempeñado cargos directivos en TVE, Diario Sur de Málaga, grupo Área, cadena COPE, Ondasur y Telesur.
Es autor de las novelas: La rosa de Gibraltar, Claveles rojos, Bajo el cielo protector y el libro de relatos: Confidencias con el espíritu de mi perro.
Licenciado en Periodismo (UCM). Durante su trayectoria ha desempeñado cargos directivos en TVE, Diario Sur de Málaga, grupo Área, cadena COPE, Ondasur y Telesur.
Es autor de las novelas: La rosa de Gibraltar, Claveles rojos, Bajo el cielo protector y el libro de relatos: Confidencias con el espíritu de mi perro.
Contacto
juanrebolloruiz@gmail.com
http://editorialcirculorojo.com/autores/juan-rebollo-ruiz-mollina/
El diagnóstico es un libro completo en su estructura, al tiempo que de amena lectura. Nada falta en esta novela que no cumpla con nota la expectativa del lector. (…)
En El diagnóstico, como en toda novela de Juanito, está el amor. El de verdad, como epicentro de su relato. El amor y el desamor. Los rencores (algunos reparados), los engaños, las mentiras, la tristeza y el optimismo.
Ese último concepto como una novedad. El autor, en su madurez, habiendo pasado, caminado y superado muchas estaciones y paisajes, no todos aptos para cualquiera, ha llegado a su cenit.
José Luis Vergara Carvajal.
Fragmento:
Capítulo I
La herencia de los nazis
El médico lo vio encender el cigarrillo a través de la ventana de la consulta y esbozó una mueca de desprecio.
Aquel hombre no merecía su conmiseración; estaba condenado irremediablemente; su adicción al tabaco desde la adolescencia le había conducido a la situación clínica que le acababa de explicar. Padecía, dicho en palabras vulgares, para que se enterase un profano en Medicina, ”La enfermedad del escaparate”.
No hay duda, la enfermedad está perfectamente tipificada y usted presenta todos los síntomas, en un estado alarmante en mi opinión – le acababa de decir minutos antes.
Un nombre y un número, que aparecieron en la pantalla del ordenador cuando el doctor tocó la tecla adecuada, pensó Pedro Rodríguez Fontalba que era él para aquel médico, un tipo de aspecto rudo, demasiado fornido para la edad que le supuso, al que veía por primera vez.
